Pyrostegia venusta, trepadora nativa de floración invernal

Pyrostegia venusta-Flor de San Juan

Pyrostegia venusta sinónimo de Pyrostegia ignea, conocida también como Bignonia de invierno, es una planta trepadora perenne. Produce una densa y abundante floración atrompetada de color naranja. Ideal para aportar color al jardín desde el otoño hasta la primavera. 

 

  • Familia: Bignoniáceas. 
  • Género: Pyrostegia, género compuesto por tres o cuatro especies de plantas trepadoras con zarcillos y de tallos lignificados. Nativas de las regiones más cálidas de América Central y del Sur. Son sensibles a las heladas. 
  • Especie: Angiosperma, plantas con flores y frutos con semillas.
  • Origen: nativa del norte de Argentina (Misiones, Corrientes, Jujuy y Tucumán). Países limítrofes: Brasil y Paraguay. 
  • Magnitud: puede alcanzar hasta los 10 m. de altura o más en climas cálidos. Es una especie vigorosa y de rápido crecimiento. 
  • Clasificación: especie trepadora mediante zarcillos (órgano de sosten que se enrosca sobre ramas o cuerpos cilíndricos, pueden ser de orígen caulinar o foliar) por lo que necesitan de un soporte. Produce tallos leñosos. 
  • Follaje: perenne. Hojas trifoliadas, de color verde medio. 
  • Floración: produce ramilletes compactos de flores tubulares de color naranja dorado. Floración prolongada, desde el otoño hasta la primavera. Sus flores atrae aves, picaflores y polarizadores al jardín. 
  • Valoración ornamental: se cultiva principalmente por su atractiva, abundante y prolongada floración naranja. 
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  • Exposición solar: pleno sol, media sombra ligera. 
  • Riego: necesita de un abundante riego en primavera-verano.
  • Clima: es sensible a las heladas. Temperatura mínima 13-15 ºC.
  • Suelo: requiere un suelo fértil y bien drenado. 
  • Reproducción: se multiplica por semillas en primavera y también por esquejes.
  • Poda: se realiza una poda de mantenimiento post-floración, cuando los tallos se hayan desarrollado de forma excesiva. 
  • Usos: ideal para cubrir grandes superficies como alambrados, muros, rejas, pérgolas y arcos resistentes donde las flores puedan colgar y lucirse libremente. 

Fuente: The Royal Horticultural Society (2004). Nueva Enciclopedia de Plantas y Flores. Ed. Grijalbo. Dr. D.G. Hessayon (2006).

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