Cada vez más los parámetros asociados a una propuesta de arquitectura sostenible se concretan sobre una base de lo más actual y cautivadora. Nos referimos a la integración de espacios interiores y exteriores por medio de elementos naturales.
El estudio de arquitectos Guz, ubicado en Singapur, adopta y aplica tales conceptos en la mayoría de sus proyectos. En un momento donde la preservación del medio ambiente es primordial, Cluny House es un claro ejemplo sobre cómo planificar y construir de una forma energéticamente eficiente y a la vez con gran belleza estética.
Paneles solares, estanques y terrazas ajardinadas recogen el agua y la reciclan recreando un entorno natural.
Ejecutada sobre una superfície de 1505 m², su estructura se desarrolló en función de un espectacular centro de interés: una piscina natural de plantas y especies vegetales típicas de la zona, que se hacen notar por su verde esplendor.
La naturaleza impera sobre el diseño contemporáneo de la construcción, absorbiendo el protagonismo a través de la presencia de árboles y plantas sobre cada rincón de su estructura.
Su interior se conecta a la perfección con el entorno verde, dejándose ver bajo los cerramientos de cristal. El empleo de revestimientos naturales como la madera de teka sobre las paredes y su aplicación sobre el mobiliario de rasgos minimalistas y la presencia de tonalidades neutras como el blanco contribuye a realzar estéticamente esta sofisticada casa.
[box]Fuente: Artículo escrito por Dione para Decoluxe.net. Fotos: pertecen a Guz Architects.[/box]